La oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO) es el tratamiento de elección en la insuficiencia cardíaca y/o respiratoria refractaria a las técnicas de soportes convencionales. Sin embargo, no todos los profesionales ni todas las instituciones de salud están capacitados para proporcionar este tipo de asistencia ventricular avanzada. Por tal motivo, estos pacientes con inestabilidad hemodinámica, necesitan ser canulados y asistidos de urgencia en el centro de menor complejidad, para luego poder ser trasladados a un centro de referencia.
Habitualmente los traslados de pacientes críticos suelen ser complejos, y no están libres de complicaciones. En el caso de aquellos asistidos en ECMO, el traslado es realmente dificultoso y puede ser fatal, si no se cuenta con personal entrenado.
En Argentina, prácticamente no se realizan estos tipos de traslado, y los pocos que se llevan a cabo son vía terrestre en Unidad de Terapia Intensiva Móvil, siendo infrecuente el traslado aéreo en avión sanitario. Independientemente del modo de transporte, es fundamental contar con un “check-list” para el traslado, que permita estandarizar el proceso, y reducir cualquier olvido o error evitable.
Respecto al personal sanitario, es conveniente que sean expertos, y preferentemente del centro de alta complejidad, que se trasladarán a la institución de origen para realizar la canulación, manejo de drogas y vía aérea, y el traslado del paciente a su propio centro. La composición del equipo debe ser multidisciplinaria, incluyendo perfusionista, cirujano cardiovascular, cardiólogo intensivista y enfermero. El número de profesionales involucrados puede ser variable, aunque sería ideal, al menos, 5 personas.
El programa de ECMO del ICBA, Instituto Cardiovascular, está funcionando desde 2014 y cuenta con 76 pacientes asistidos con ECMO Veno arterial, ya sea por shock cardiogénico o paro cardiorrespiratorio refractario, con una mediana actual de más de 15 asistencias por año, siendo en Latinoamérica de aproximadamente 5 a 6 por centro por año. Formamos parte de la Organización Mundial de Soporte Extracorpóreo (ELSO), cumpliendo con los estándares internacionales, y somos actualmente uno de los pocos centros que está realizando ECMO de traslado en Argentina.
En comparación con los ECMO que se implantan in situ, aquellos que se colocan en un centro de menor complejidad con posterior traslado no impresionan aumentar la mortalidad intrahospitalaria, siempre que sean realizados por profesionales calificados. Si bien el traslado agrega complejidad y eventuales complicaciones, la participación de expertos y el uso de procesos estandarizados con una adecuada logística, no debería modificar la morbi-mortalidad de los pacientes.
Finalmente, creemos que en países con recursos limitados, con escaso acceso a la asistencia ventricular avanzada, es fundamental incentivar y centralizar el programa de ECMO en centros de alta complejidad, volumen y experiencia. Para ello es fundamental contar con un programa de ECMO de traslado, para continuar la atención de pacientes graves con shock cardiogénico de otras instituciones, en centros con capacidad de asistencia ventricular y trasplante cardíaco. De esa manera, se podrá ofrecer la máxima posibilidad de sobrevida a nuestros pacientes.
El paso de Mito a Realidad, lo genera el equipo de trabajo, y la convicción de que lo único imposible, es lo q no se intenta.
Excelente artículo Leonardo Seoane!
Muy importante y valorable la acción médica en el servicio de ambulancia , recomendable